La vagina es la unión del útero con la vulva, tiene forma de tubo aplanado en sentido oblicuo y posterior. Debe mantener su tonicidad y elasticidad para proporcionar su correcta función tanto en las relaciones sexuales, como en el mantenimiento de los órganos pélvicos en su posición.
Esta formada por fibras musculares, tejido conectivo y posee una gran vascularización e inervación, lo que permiten su gran adaptabilidad durante el parto, pero debemos asegurarnos que recupera su tono y elasticidad después de este, ya que puede sufrir daños que generen cambios en el tejido y ser los causantes de dolor coital en el postparto.
¿Como sabemos si tenemos un tono vaginal alterado?
Síntomas como; frecuencia de escapes de gases vaginales, excesiva abertura de la entrada vaginal, dolores en la relaciones sexuales, sequedad de la mucosa, falta de deseo sexual…son algunos ejemplos.
Debemos trabajar la musculatura perineal, pero también asegurarnos del buen tono vaginal después del parto, así como, en todos los momentos de nuestra vida ginecológica!
Para ello la radiofrecuencia uro-ginecológica es una gran aliada, ya que mejora el trofismo, generando la formación de colágeno y elastina de la propia célula, y estimulando el propio sistema de sostén.
En otro post hablaremos de la importancia de la alimentación para un buen funcionamiento de la mucosa vaginal ,ya que es vital para su óptima recuperación